Las colecciones y objetos de Diabla no están pensados para entornos convencionales o previsibles. Pueden ser desde esa pieza sutil que aporta un toque especial de manera puntual a un ambiente, hasta manifestarse con total protagonismo al tratarse de un elemento rompedor por su diseño o por su inusual propuesta de color. Y éste es el caso de la colección 356, una de las series más llamativas y originales de Diabla tanto por su contundente estética aerodinámica como por su nueva paleta de color.